LA TEORÍA DEL FILTRO AFECTIVO- KRASHEN
En esta primera entrada me gustaría hablar de la teoría del filtro afectivo de Krashen.
Krashen es lingüista y autor de múltiples teorías sobre la enseñanza bilingüe y el aprendizaje de idiomas. Algunas de sus hipótesis más conocidas son la hipótesis de adquisición-aprendizaje, la hipótesis de entrada, la hipótesis del monitor, la hipótesis del orden natural y el filtro afectivo.
En esta entrada nos centraremos en la última mencionada.
¿En qué consiste esta teoría?
La teoría del Filtro Afectivo, argumenta que es necesario crear un filtro afectivo débil en la clase para potenciar un ambiente agradable de aprendizaje donde los alumnos se sientan libres y cómodos para aprender y desarrollar la competencia comunicativa.
De esta manera, como profesores debemos garantizar un espacio abierto, flexible y accesible como es el aula para que nuestros alumnos puedan llevar a cabo la experiencia de aprendizaje.
Proporcionar un entorno seguro y enriquecedor en el que todo el mundo tenga importancia dará oportunidades a nuestros alumnos para iniciarse en el uso del la lengua de forma natural y relajada; sin corrección, presión o la sensación de equivocarse.
En mi opinión personal creo que esta teoría la podemos relacionar con las emociones.
En la sesión VC9 la profesora nos hizo reflexionar sobre nuestro profesor favorito de idiomas, y ¿Quién no recuerda a un profesor específico? Ya sea para bien o para mal (desgraciadamente) todos nos acordamos de esa persona, porque los humanos podemos olvidar lo que un profesor nos explicó pero nunca cómo nos hizo sentir.
Creo que las emociones son esenciales en el proceso de razonamiento y decisión, son las bases de la curiosidad y la atención, de hecho son decisivas en el proceso de aprendizaje.
Me gustaría terminar esta entrada con una cita de la neurocientífica Marián Rojas: "Nuestro cerebro se transforma cuando hay ilusión. La ilusión favorece la migración de las neuronas al hipocampo, el área responsable del aprendizaje."
Para terminar, os adjunto un vídeo muy interesante de Begoña Ibarrola, psicóloga y escritora, sobre las emociones y el aprendizaje.
Muchas gracias por leerme,
Marina S.A
Bibliografía consultada:
- Guillén, J. C. (2017). Neuroscience in the classroom. Create Space
- Krashen, S. (1982). Principles and practice of second language. Pergamon Institute of English
La teoría del filtro afectivo de Krashen siempre será de mis teorías favoritas y posiblemente la que más tengo en mente a la hora de trabajar en el aula. Me ha gustado cómo has relacionado esta teoría con el magnífico vídeo de Begoña Ibarrola, donde tan bien habla de las emociones. Gracias por compartirlo con nosotros pues no conocía a esta profesional y me he quedado asombrada escuchándola.
ResponderEliminarRespecto a este mismo tema de las emociones, me gustaría saber cómo trabajas tú este ámbito en tu día a día como profe de primaria. Es un tema muy delicado y complejo, puesto que están en el periodo de descubrimiento propio, de no saber qué les está ocurriendo y cómo controlarlo, no tienen aún esas herramientas necesarias de gestión emocional tanto propia como de los demás. Por ello, como compañera de profesión, me gustaría escuchar qué te funciona a ti dentro del aula.
Así bien, adjunto a continuación también una entrada de blog de ELE Internacional donde hablan de la importancia de las emociones en la clase de ELE y ofrecen varias herramientas que poder emplear con los alumnos https://eleinternacional.com/blog/las-emociones-en-el-aula-como-trabajarlas-con-tus-alumnos/
Espero que te inspire para sacar algunas ideas prácticas para el aula.
Sonia Cardona
¡Hola Sonia!
EliminarMuchas gracias por tu comentario, tan reflexivo y lleno de interés por el tema de las emociones en el aula. Coincido plenamente contigo en que la teoría del filtro afectivo de Krashen es una herramienta esencial para los docentes, especialmente en la enseñanza de lenguas o en cualquier ámbito educativo. Las emociones juegan un papel clave en el aprendizaje, y conectar esta teoría con profesionales como Begoña Ibarrola nos ayuda a entenderlo aún mejor.
En cuanto a cómo trabajo este ámbito en mi día a día como docente de primaria, te comparto algunas prácticas que me han funcionado bien:
- Rutinas emocionales al inicio del día:
Cada mañana hacemos una pequeña actividad de “registro emocional”. Los alumnos tienen un espacio para expresar cómo se sienten mediante colores, caritas o palabras simples. Esto no solo les ayuda a tomar conciencia de sus emociones, sino que también me permite adaptar la dinámica del día según el estado del grupo.
- Lecturas y cuentos sobre emociones:
Utilizo cuentos que abordan temas como la empatía, el manejo de la ira o la tristeza. Les ayuda a desarrollar un vocabulario emocional que pueden usar para expresarse mejor.
- El rincón de la calma: en clase tenemos un espacio especial para los momentos en que los niños necesitan gestionar sus emociones.
- Dramatización y role-playing:
Propongo juegos de rol en los que recreamos situaciones de conflicto o de empatía, como consolar a un amigo triste o resolver una discusión. Este tipo de actividades les permite practicar habilidades sociales y de gestión emocional en un entorno seguro.
He leído la entrada que me compartiste de ELE Internacional y me parece muy interesante. Algunas de las herramientas propuestas, como las tarjetas de emociones y los ejercicios de mindfulness, también se pueden adaptar perfectamente a clases de primaria. ¡Gracias por compartirla!
Un saludo,
Marina S.A